Responsabilidad Social Corporativa (RSC)
Desde nuestra empresa, estamos en constante evolución para ofrecer a nuestros clientes una imagen de sostenibilidad mediante la implantación de energías renovables, sistemas de ahorro energético y eficiencia. Esto es debido a que el presente y futuro de las empresas pasa por la responsabilidad social corporativa (RSC), siendo un compromiso voluntario que está convirtiéndose paulatinamente en una prioridad cada vez más importante para todo tipo de empresas, independientemente de su índole y tamaño. En el contexto de creciente globalización, de mayor sensibilización social, medioambiental y de mayor fluidez de las comunicaciones, el concepto de responsabilidad de las empresas ha cobrado un nuevo impulso, convirtiéndose en un atributo de competitividad a nivel internacional.
¿Por qué es importante la RSC? La reputación adquirida por la empresa tanto en el ámbito social como en el ecológico influye en los clientes y consumidores. El mercado del empleo es competitivo y los profesionales cualificados aspiran a trabajar y permanecer al servicio de empresas socialmente responsables. El balance social prima cada vez más en las decisiones de los inversores, en paralelo a la rápida expansión de los fondos de inversión ética. La RSC permite la gestión estratégica de los riesgos internos y externos tanto en el ámbito social como en el medioambiental. Las iniciativas socialmente responsables ganan espacio en la atención pública a la vez que mejora su presencia en los medios de comunicación.
Se ha demostrado que la responsabilidad social y medioambiental reduce los costes operativos. En los últimos 15 años, los mejores resultados bursátiles los consiguieron las empresas que aplican la RSC; un ejemplo reciente son las Olimpiadas de Londres donde sólo podían acceder a ser contratadas empresas que tuvieran una política de Responsabilidad Social Corporativa. Otro caso llamativo es que el gobierno de Holanda tiene el compromiso de que el 100% de las compras que realice son bajo la RSC. Una compañía, o es sostenible, o no existirá. Es la nueva máxima de la gestión empresarial dentro de la política de manejo de los intangibles. La sostenibilidad de las compañías es un factor clave en los programas de RSC, y esta a su vez, uno de los factores clave en la creación del valor de la reputación. Esta es la tesis que manejan los mayores expertos en la gestión de intangibles. El valor de las compañías reside en los mencionados intangibles, y por ello es necesario gestionarlos eficazmente. ‘Hoy el 80% del valor de las compañías reside en sus activos y recursos intangibles. En los años ochenta el 80% del valor de las compañías estaba en la parte tangible.
Y sin embargo, la paradoja que se produce es que muchas empresas se siguen gestionando de acuerdo a una realidad que ya no existe. De la sostenibilidad a la reputación Existe una relación ‘causa-efecto’ entre la responsabilidad social y su impacto en la reputación. La responsabilidad social es realidad de la empresa, mientras que la reputación son percepciones, y lo que mueve los comportamientos de los públicos no son las realidades, sino las percepciones, para ello la empresa debe mostrar que su objetivo no se basa en el máximo beneficio como ha sido hasta ahora sino en retornar parte de este como un compromiso con la sociedad aplicando la RSC. Hemos visto también el papel clave que juega la ciudadanía y cómo vivimos en una era de desconfianza hacia las instituciones tanto públicas como privadas. Y actuar con responsabilidad social a la vez que trasladar el compromiso con la sostenibilidad a las audiencias clave de una organización puede ayudar a bajar esas barreras de confianza, que es el principal reto de los profesionales de la comunicación. Responsabilidad y confianza son más necesarias que nunca y eso se consigue siendo competentes, empáticos, resolutivos y anteponiendo sobre cualquier decisión el bien común. La responsabilidad es cohesión, es valor añadido, es sostenibilidad, es transparencia, es prudencia, es rigor y, en esencia, confianza.
¿Cómo consigo adecuarme a estos conceptos de RSC?
Es necesario realizar un estudio de su empresa para saber en que forma puede conseguir elevar los niveles de responsabilidad social corporativa. Deberíamos empezar por tener nuestras instalaciones con los mayores niveles de eficiencia energética. Esto se consigue con niveles correctos de aislamiento y consumo energético (climatización, láminas de protección solar), iluminación responsable y sostenibilidad en la gestión de residuos (trituradoras de cocina y compactadoras de residuos inorgánicos)